lunes, 13 de diciembre de 2010

Para ti...un tierno ABRAZO!!!!



Un ABRAZO es el festejo del encuentro,

el consuelo del dolor,

la alegría de tener a la persona que aprecias...

 

Un ABRAZO pone al descubierto nuestros sentimientos,

nuestros miedos,

nuestra necesidad de contención...



Un ABRAZO nos acerca corazón con corazón,

nos deja sentir la intensidad de nuestros latidos,

el calor de nuestros cuerpos...



Un ABRAZO es entregarse al otro,

y dejar que el otro también se entregue...

Es resguardo... es protección...



¿Quién no necesita en algún momento de su vida

guarecerse entre unos brazos llenos de ternura?

¿Quién no necesita desnudar sus sentimientos

sin palabras rodeando con amor a quien uno quiere?



Yo sí lo necesito

y es tan grande esta necesidad

que en este preciso instante

quisiera abrir los brazos

para poder ABRAZARTE


(anónimo)



sábado, 4 de diciembre de 2010

Pasado, Presente y Futuro de las Relaciones Humanas


La Conciencia de la Ciencia
La ciencia ha ido marcando la forma en que desde nuestra razón y lógica, podemos percibir el mundo. A finales del siglo XII y principios del XIII, Isacc Newton con su concepción “sólida” de la realidad, implantó una forma de percibir la esencia de la naturaleza en términos de espacio tridimensional y tiempo lineal. La física Newtoniana se extendió a lo largo del tiempo hasta el siglo XIX, para describir un universo compuesto fundamentalmente por bloques sólidos llamados átomos.

Esto ha hecho que obviemos nuestra naturaleza interna más profunda. El pensamiento newtoniano conformó un paradigma de pensamiento limitante y falto de respuestas profundas. Durante siglos, la ciencia, de conformidad con los poderes de la religión, acepto que la realidad es algo sólido, predecible y medible. El paradigma newtoniano tardo tiempo en ser puesto en entredicho. Más de 600 años bajo una forma de pensamiento limitante y maltrecho que trajo como consecuencia el enraizamiento del sistema de creencias patriarcal, el cual está llegando a su fin.

Fue a principios del siglo XIX cuando se descubrieron los fenómenos electromagnéticos o “Concepto de Campo”: teoría que demostró que, la condición en el espacio tiene potencial para producir una fuerza. Michael Faraday y James Clerk Maxwell, descubrieron que las partículas, neutrones y protones creaban una carga, una alteración en el espacio circundante. Así pues el universo está lleno de campo que crean fuerzas mutuamente interactivas. Nos afectamos unos a otros. La forma en que nos afectamos unos a otros, depende del observador, como más tarde la ciencia moderna confirmó.

Albert Einstein en 1905 publicó su teoría de la Relatividad donde afirmaba que la naturaleza de la realidad no es tridimensional, si no tetra-dimensional. Existe una relación estrecha entre el espacio y el tiempo, y esta constante “espacio temporal” es variable y no se puede concebir la una sin la otra. El tiempo lineal no se da como tal, la linealidad temporal varía según el observador. El mero hecho de observar cambia la realidad.

La materia es energía que ha perdido velocidad o se ha cristalizado. Nuestros cuerpos son energía. En la observación del mundo subatómico, se ha descrito a la luz como una onda de una partícula, un universo basado en la dualidad de conceptos o complementariedad. Einstein postuló que todas las formas de radiación electromagnéticas pueden aparecer no solo en forma de ondas si no ”Quantos” o paquetes de energía. Así la dualidad no se entiende como una separación de los polos o de los contrarios, sino que son fuerzas complementarias y necesarias. El principio masculino-femenino, luz-oscuridad han de ser integradas en armonía, no puede existir la una sin la otra.

El descubrimiento de la naturaleza Holográfica de la realidad da respuesta a entender las leyes físicas primarias como parte de un todo global. El concepto de Holograma especifica que cada pieza es una representación exacta del “todo” y se puede utilizar para reconstruir el holograma completo. El universo está compuesto por una trama de pautas energéticas inseparables. Es un todo dinámico que incluye siempre de forma esencial al Observador.

Desde el punto de vista “Holográfico” si todos formamos parte de un TODO, cada uno de nosotros afecta al resto. El doctor Karl Pribam, famoso investigador del cerebro humano ha demostrado con muchas pruebas, que la naturaleza del cerebro es puramente holográfica. Pribam afirma que el cerebro emplea un proceso holográfico para extractar información de un campo holográfico que trasciende el tiempo y el espacio.

Debemos entender que el ser humano tiene una razón por la cual está encarnado en la tierra y dado a que su naturaleza es multidimensional afecta a diferentes realidades de forma simultánea. Albert Einstein en su teoría de la relatividad afirma que el tiempo y el espacio son un matrimonio inseparable, pero que sus secuencias no son lineales ni predecibles. El tiempo tal cual lo hemos conocido según el calendario gregoriano, nos muestra una sucesión del tiempo lineal, robotizado, desajustado de las leyes naturales.

Esto implica que nuestra consciencia espacio-temporal ha sido manipulada de forma artificial. Si somos condicionados a experimentar nuestra realidad como algo lineal, como algo que podemos controlar, este paradigma de pensamiento nos lleva al sufrimiento y la frustración. Una consciencia holística nos acerca a entender la esencia de lo que somos.


LAS RELACIONES HUMANAS


Todos estamos relacionados. Una Relación es la manifestación de lo que somos proyectándonos en el exterior.

La primera y última relación es la que tenemos con nosotros mismos. Yo soy lo que soy porque en mi reposan los sedimentos de mis ancestros, de toda la historia de la humanidad, así mismo también reposan todos los potenciales. La física cuántica nos muestra un universo lleno de posibilidades de las cuales yo soy una.

Escudriñar nuestra propia naturaleza nos lleva adentrarnos en los entresijos de la dualidad, a entender que la polaridad es necesaria para que la vida sea posible. Cuando mencionamos al observador nos referimos al despertar de ese YO Consciente que comienza a observarse a sí mismo, y descubre quien es en verdad.

Al igual que las leyes inmutables de la naturaleza, dentro de nosotros conviven diferentes manifestaciones de nuestra naturaleza dual: consciencia-inconsciencia, luz-sombra, acción-reacción.

Si negamos nuestra sombra, es decir nuestro inconsciente, estamos negando una parte muy importante de nuestra naturaleza. Carl Jung en los estudios que realizó sobre la mente humana sacó a la luz la importancia del inconsciente en nuestra conducta y como esta afecta nuestro comportamiento. Los descubrimientos de Jung junto con Freud marcaron un antes y un después en el conocimiento de la mente humana.

Es necesario que afrontemos nuestra “sombra” pues ella es la maestra que nos muestra lo que somos. El reflejo de lo que somos está en nuestras relaciones, a nuestro alrededor. Si la sombra que permanece en nuestro inconsciente es negada por el sujeto su realidad será experimentada desde una parte, creando separación, angustia y por consiguiente enfermedad.

En la forma como percibimos el mundo están las claves de lo que somos o creemos que somos. Respondiendo a la ley universal del “dar y recibir” nuestros actos determinan la manera en que sentimos y pensamos. Percibimos el exterior como un reflejo de aquello que damos.

Conforme a esta premisa cabe plantearnos que lo que nosotros vemos reflejado en nuestras relaciones es exactamente lo que somos. Las relaciones son nuestra vía de expresión, de todo lo que proyectamos en el exterior. Las relaciones nos conforman, nos dan la guía para descubrirnos. Estamos interrelacionados, lo que hacemos afecta al resto, nuestros pensamientos, sentimientos afectan a la realidad a través de nuestras acciones e intenciones.

Traumas & Memorias Ancestrales


Cada uno de nosotros tenemos nuestras propias lecciones que aprender. En nuestro largo recorrido de encarnaciones a veces hemos cometido errores o hemos sido víctimas o propiciado abusos e injusticias, hemos experimentado toda clase de experiencias.

Desde el punto de vista genético en nuestros genes están contenidas las memorias de todo lo que hemos vivido. Nuestro cuerpo físico es el que nos muestra como está nuestra psique. Debbie Shappiro en su libro “Cuerpo Mente” describe como las actitudes conflictivas, los temores, y los sentimientos reprimidos influyen directamente en el organismo y su funcionamiento. Descifrar los mensajes que nuestra mente nos manda a través del cuerpo, puede ayudarnos a sanar nuestra psique y por tanto nuestro cuerpo. Por tanto es necesario que aprendamos a manejar nuestras emociones. Expresar adecuadamente nuestras emociones puede evitar que en un futuro nuestra energía corporal se bloquee y nos lleve consecuentemente a enfermar o morir.

Hay diferentes técnicas que nos ayudan a liberar esas memorias, por ejemplo La técnica de Liberación Emocional (TLE), donde nos adentramos en nuestro inconsciente emocional, liberándolo gracias a la voluntad propia. El Rebirthing (Renacimiento), Constelaciones Familiares son técnicas que nos ayudan a rememorar experiencias con el fin que podamos liberar las emociones que quedaron atrapadas en la experiencia pasada.

En la concepción, gestación y el nacimiento, es donde más memorias de dolor y sufrimiento arrastramos, cuando no somos deseados o queridos por nuestros progenitores desarrollamos un profundo dolor al rechazo y abandono. El parto es por desgracia hoy día un trance muy traumático para el bebé y la madre. Así comienzan nuestras primeras programaciones a nivel celular que se unen a las que el ADN trae del ámbito genético familiar.

Mirar de frente nuestro dolor, enfrentarlo para sanarlo se vuelve necesario pues de lo contrario estamos sujetos a los caprichos y limitaciones de nuestros miedos o formas de pensamiento arquetípicas, y todo ello lo proyectamos en el mundo de forma inexorable. Es necesario dar un paso hacia atrás para ver el pasado operando en nuestro presente.

Para sanar las relaciones es necesaria la sanación de nuestras propias heridas, algunas de estas heridas son tan profundas que adentrarnos en ellas conlleva la liberación de una pesada carga que cae sobre todo un linaje o clan familiar.

La Familia & Yo

La familia es una entidad completa, cada integrante está ocupando un lugar dentro del cuadro, cuando comprendemos ese orden, entendemos que nuestro primer gran obstáculo está reflejado en las relaciones con nuestros familiares.

El seno familiar es el primer entorno donde comienzan a darse las primeras relaciones con el mundo exterior. La relación con padres y hermanos determina mis primeras grabaciones. Si crecemos dentro de una familia disfuncional o con carencias afectivas tendremos dificultades para vivir una vida equilibrada y sana emocionalmente.

La relación materna nos va a determinar nuestra conexión con la madre tierra, nuestra actitud ante la vida, nuestra creatividad. La relación con el padre nos va a marcar nuestros valores, principios, disciplina, la inteligencia y la materialización de nuestras metas. Si estos valores son falsos como los “patriarcales” (sistema de creencias basado en “el miedo al amor”) viviremos fragmentados imposibilitándonos de integrar el yin y el yang, el equilibrio de estas dos fuerzas en nosotros.

La posición que ocupamos con respecto a nuestros hermanos influirá en el modo de comportarnos en el mundo. Por ejemplo los primogénitos suelen ser los que recogen energéticamente las diferencias entre sus padres. Los primogénitos suelen tomar la responsabilidad desde muy pequeños, pero su actitud no es la propia de su edad, esta sería una madurez obligada que puede originar en el futuro mucho resentimiento hacia los padres.

Los hermanos que están en posiciones intermedias tienen además otros elementos que lo hacen sentir separados de sus padres, tienen que desarrollar una mayor habilidad para llamar la atención y ser tenidos en cuenta. Aquí es donde sentimos el síndrome del “príncipe destronado” cuando detrás de nosotros llega un nuevo retoño que nos robará toda la atención de nuestros padres. Los hermanos pequeños son los que reciben toda la atención de padres, hermanos y familiares….pero esta sobreprotección puede acarrear problemas en el sujeto para enfrentarse por sí mismo al mundo.

También habría que diferenciar entre hombres o mujeres, a cada uno encarna un rol muy distinto dentro del clan familiar.

Respecto al lado Femenino “La Mujer”, dentro del sistema de creencias patriarcal ocupa la posición “esclava” y sumisa del hombre, desde este ángulo la mujer carga mucha opresión y falta de expresión, un gran peso de más de 5000 años de represión y sometimiento. El sistema de creencias patriarcal ha creado una herida profunda en la psique de la mujer y por consiguiente en el hombre.

Cuando las relaciones entre padres e hijos no son sanas ni abiertas, cuando los hijos se convierten en la vía de escape de la frustración de los progenitores, esto suele desembocar en numerosos conflictos soterrados como los abusos sexuales, provenientes de una proyección distorsionada de los padres a los hijos. El mito de Edipo y Electra representa la sombra colectiva entre padres e hijos.

Es lamentable la cantidad de abusos a menores que se gestan en el entorno familiar por los propios padres. Esto no solo quebranta las barreras de la confianza sino que además crea traumas muy profundos.

La madre con falta de amor a sí misma, se manifiesta en el arquetipo “de la madre siniestra” que perpetua ese dolor hacia sus hijos. Laura Gutman famosa psicóloga argentina experta en maternidad y crianza, afirma que la mayoría de los problemas que tenemos al relacionarnos provienen de una “falta de maternaje”, es decir una falta de amor materna. En su artículo “Carencia de maternaje y organización de dinámicas violentas” afirma:

(….)Cuando las expectativas naturales que traía el pequeño son traicionadas, aparece el desencanto, junto al miedo de ser nuevamente herido. Y después de muchas experiencias similares, brota algo tan doloroso para el alma como es el enojo, el miedo y la resignación. Cuando ese ser tan pequeñito no se siente valioso ni bienvenido, se convertirá necesariamente en un ser humano sin confianza, sin espontaneidad y sin arraigo emocional (….)

Nuestros padres han tratado de educarnos conforme a su propia educación y repitiendo el patrón que ellos en su niñez vivieron, desde la inconsciencia. Si la relación con nuestros padres está quebrada, y si ante esto, lo único que alimentamos es el odio hacia ellos, no estamos comprendiendo nada, liberarnos de la carga de resentimiento es absolutamente necesario.

Nuestros padres son nuestros guías, ellos nos han dado una memoria que sanar y liberar, nos han dado la fuerza y la experiencia de todo un linaje. Debemos amarlos simplemente por el mero hecho que nos han dado la vida, nos han servido de vehículo para estar aquí.

Relaciones de Pareja & Concepción Consciente


Las relaciones de pareja son la llave final para sanar aquello que permanece bien oculto en nuestro interior. En pareja, gracias al amor que se comparte de forma mutua, se pueden liberar candados muy ocultos dentro de la psique del hombre y de la mujer. En pareja mostramos lo más escondido de nuestra alma y lo mejor de nuestro corazón cuando estamos con la persona amada. A menudo las relaciones de pareja fracasan por una falta de aceptación y comprensión de nuestra sombra proyectada en el otro. Las crisis han de ser tomadas como un espacio de toma de consciencia de nosotros reflejados en el otro.

En pareja, si desde la consciencia ambos se acompañan en sus procesos de crecimiento y evolución, los lazos de unión serán más fuertes. La naturaleza es tan sabia que nos lleva a unirnos con otras personas con el fin de que podamos sanar.

La responsabilidad de traer hijos al mundo, no debería ser tomada a la ligera pues de nosotros depende el futuro comportamiento de nuestros hijos.

Hoy más que nunca, la unión del Hombre y la Mujer a de plantearse desde la consciencia y reconocimiento de tu otra parte, como tu complementario, pero para que ese complemento encaje sin fricciones primero hemos tenido que pulirnos.

La decisión de ser padres debería ser un acto sagrado, desde el cual, a través de nuestro amor y respeto mutuo damos la bienvenida al alma del niño, recordando así la naturaleza sagrada de nuestra existencia y honrando al nuevo ser que llega.

Los niños del futuro, índigo, cristal, arcoíris, requieren de nuestra total consciencia y responsabilidad, muchos de ellos están preparados para encarnar en un marco familiar amoroso y consciente.

Para ello pasado, presente y futuro han de danzar en perfecta armonía y entendiendo el pasado, sanándolo, creamos un presente lleno de potenciales para el futuro, desde el aquí y el ahora.

Surá Lillo
Terapeuta Holístico
Revista: Universo Holístico