Aquí plasmo y os invito a disfrutar, una de mis vivencias que tuve en mi estado Alfa hace unos meses atrás. Esa maravillosa Dimensión, en la que todos los días me sumergo, para poder revitalizarme y fortalecerme, gracias a mi Yo femenino y mi Yo masculino. Dos partes de mí a las que quiero y respeto, ya que ellos siempre me dán todo aquello que necesito y me aportan de muy buenos y fecundos momentos, como éste.
El Sabio
Entré en mi sala alfa, como de costumbre…y mi consejero me esperaba, un poco impaciente, porque quería darme la noticia de la llegada inesperada de un Gran Sabio…
-Buenas tardes (dije yo), perdón por el retraso, me he demorado por asuntos familiares, espero no haberte importunado…
-Consejero: En absoluto pero ya sabes…cuales son tus deberes y también tus obligaciones..pensaba que ya hoy no ibamos a tener el placer de tenerte entre nosotros –dijo en un tono seco y serio- Siguió comentándome…-por cierto, tengo el placer de presentarte la visita de un personaje excepcional, un Gran Sabio que habita en altos planos de conciencia, un erudito de obra y de palabra. Él es Moisés.
-Buenas tardes querida (dijo Moisés tomándome por los hombros). Es grato para mí el poder estar en estos momentos cerca de tu presencia. Mi visita, a esta humilde morada, es para poderte ofrecer una información valiosa..de la cual, sólo tú sabes el porqué y el para qué de ella.
Nos estrechamos las manos y después nos dimos un abrazo.
Yo: Muchísimas gracias, para mí es un honor…su visita. Dígame, cual es su mensaje. ¿Es importante que lo sepa?
Moisés: Si…es de vital importancia que tengas esta información…pero, si no te importa ¿te gustaría pasear por la orilla de la playa? Creo que es el lugar más indicado para ello….
Yo: ¡Por supuesto! Estoy a su disposición.
Mis consejeros se quedaron dentro de la sala y… Moisés y yo salimos hacia el exterior, donde pudimos sentir descalzos la textura de la arena de la playa.
Mientras nos acercábamos a la orilla, Moisés observaba todos los movimientos….
Moisés: Vengo a revelarte un mensaje, del cual solo tú podrás utilizar a tu beneplácito. Quiero que tengas muy claro un concepto y ese es: “la quietud” …si…porque a través de ella podrás resolver o solventar todo tipo de problema en tu vida “física” que se te presente en el “hoy”.
…..Hablo del “hoy” ya que siempre estamos en un “presente”. Ese presente que alimenta el pasado y el futuro…
…Todo viene y ….tal como viene, también se vá…vés como se aproximan las olas hacia la orilla y a su vez se alejan…pues todo es un transcurrir en esta vida.
….Todo sufrimiento, todo tormento, toda angustia ha llegado a nosotros y después de un tiempo, se ha marchado, dejando una semilla que después germinará un aprendizaje en nuestro interior tan enriquecedor que sacará toda la ESENCIA de nuestro SER.
…Esas vivencias son totalmente imprescindibles para poder seguir nuestra evolución y sacar todo lo mejor de ¡nosotros! Créeme…no renuncies a cometer errores, porque ellos te harán desprenderte de todo aquello que no te aporte lo mejor para tí y así darte cuenta de lo que realmente TU VALES.
…Bien… para ello es importante que tengas muy presente la actitud que en estos momentos tienes…si es de tristeza o de alegría, todo ello podrás canalizarlo a través de la quietud…ese lugar donde sólo tú tienes la llave para obtener todo aquello que necesites.
…En ese lugar, en ese rincón de tu consciencia, debes de aferrarte, porque será tu bastón de apoyo..sólo allí conseguirás obtener la SEGURIDAD, la CONFIANZA, la FELICIDAD que siempre buscabas fuera de tí…Sé que te es fácil acceder a ese estado en tu consciencia, porque lo tienes muy bien aprendido de otras vidas…pero más fácil te será si lo utilizas constantemente. Nada ni nadie puede, ni podrá acceder, a ti, porque solo tú tendrás tu propio control.
…Simplemente es dejarte llevar en ese estado y sentir plenamente. Por ello yo te obsequio con esta llave mágica… (llevaba entre sus manos una pequeña llave que me posicionó en mi entrecejo)… te la deposito con el amor y la sabiduría que me otorgan mi nivel multidimensional para que seas “fuente de energía” y “luz divina”.
Ante majestuoso ritual era partícipe el mar, el cielo y los seres de luz que fueron apareciendo ante nosotros.
Yo: gracias…por su generosidad. A todos… ¡gracias por compartir conmigo esta vivencia tan maravillosa!
Moisés: Ahora sabes cual es tu compromiso..tienes dentro de tí algo muy especial que te va a ayudar en este peregrinar..Mi misión a terminado….y debo de regresar a mi nivel vibracional, no obstante… comunicarte que ahora estas en un camino dichoso y lleno de grandes expectativas, que solo tú descubrirás poco a poco, a lo largo del tiempo.
Nos fundimos en un amoroso abrazo..Le volví a dar las gracias por su presencia y por su lección magistral. Siguió caminando por la orilla de la playa hasta que su silueta se difuminó en el horizonte..
Yo volví, poco a poco, a mi sala llena de una emoción incontenible. Al llegar a ella me abracé a mi consejero y me eché a llorar de alegría, no era consciente todavía de la experiencia que había vivido..Me consoló con sus besos y me ofreció a beber una infusión para calmar mi estado..
Mi consejero volvió a recordarme mis tareas y a preguntarme si mañana volvería. Y claro… yo le contesté un SI! rotundo. Había entendido muy bien el propósito por el que me había visitado Moisés, aquél Gran Sabio…así que me despedí de él efusivamente e inicié el camino al estado natural..
Inma Gálvez.
Entré en mi sala alfa, como de costumbre…y mi consejero me esperaba, un poco impaciente, porque quería darme la noticia de la llegada inesperada de un Gran Sabio…
-Buenas tardes (dije yo), perdón por el retraso, me he demorado por asuntos familiares, espero no haberte importunado…
-Consejero: En absoluto pero ya sabes…cuales son tus deberes y también tus obligaciones..pensaba que ya hoy no ibamos a tener el placer de tenerte entre nosotros –dijo en un tono seco y serio- Siguió comentándome…-por cierto, tengo el placer de presentarte la visita de un personaje excepcional, un Gran Sabio que habita en altos planos de conciencia, un erudito de obra y de palabra. Él es Moisés.
-Buenas tardes querida (dijo Moisés tomándome por los hombros). Es grato para mí el poder estar en estos momentos cerca de tu presencia. Mi visita, a esta humilde morada, es para poderte ofrecer una información valiosa..de la cual, sólo tú sabes el porqué y el para qué de ella.
Nos estrechamos las manos y después nos dimos un abrazo.
Yo: Muchísimas gracias, para mí es un honor…su visita. Dígame, cual es su mensaje. ¿Es importante que lo sepa?
Moisés: Si…es de vital importancia que tengas esta información…pero, si no te importa ¿te gustaría pasear por la orilla de la playa? Creo que es el lugar más indicado para ello….
Yo: ¡Por supuesto! Estoy a su disposición.
Mis consejeros se quedaron dentro de la sala y… Moisés y yo salimos hacia el exterior, donde pudimos sentir descalzos la textura de la arena de la playa.
Mientras nos acercábamos a la orilla, Moisés observaba todos los movimientos….
Moisés: Vengo a revelarte un mensaje, del cual solo tú podrás utilizar a tu beneplácito. Quiero que tengas muy claro un concepto y ese es: “la quietud” …si…porque a través de ella podrás resolver o solventar todo tipo de problema en tu vida “física” que se te presente en el “hoy”.
…..Hablo del “hoy” ya que siempre estamos en un “presente”. Ese presente que alimenta el pasado y el futuro…
…Todo viene y ….tal como viene, también se vá…vés como se aproximan las olas hacia la orilla y a su vez se alejan…pues todo es un transcurrir en esta vida.
….Todo sufrimiento, todo tormento, toda angustia ha llegado a nosotros y después de un tiempo, se ha marchado, dejando una semilla que después germinará un aprendizaje en nuestro interior tan enriquecedor que sacará toda la ESENCIA de nuestro SER.
…Esas vivencias son totalmente imprescindibles para poder seguir nuestra evolución y sacar todo lo mejor de ¡nosotros! Créeme…no renuncies a cometer errores, porque ellos te harán desprenderte de todo aquello que no te aporte lo mejor para tí y así darte cuenta de lo que realmente TU VALES.
…Bien… para ello es importante que tengas muy presente la actitud que en estos momentos tienes…si es de tristeza o de alegría, todo ello podrás canalizarlo a través de la quietud…ese lugar donde sólo tú tienes la llave para obtener todo aquello que necesites.
…En ese lugar, en ese rincón de tu consciencia, debes de aferrarte, porque será tu bastón de apoyo..sólo allí conseguirás obtener la SEGURIDAD, la CONFIANZA, la FELICIDAD que siempre buscabas fuera de tí…Sé que te es fácil acceder a ese estado en tu consciencia, porque lo tienes muy bien aprendido de otras vidas…pero más fácil te será si lo utilizas constantemente. Nada ni nadie puede, ni podrá acceder, a ti, porque solo tú tendrás tu propio control.
…Simplemente es dejarte llevar en ese estado y sentir plenamente. Por ello yo te obsequio con esta llave mágica… (llevaba entre sus manos una pequeña llave que me posicionó en mi entrecejo)… te la deposito con el amor y la sabiduría que me otorgan mi nivel multidimensional para que seas “fuente de energía” y “luz divina”.
Ante majestuoso ritual era partícipe el mar, el cielo y los seres de luz que fueron apareciendo ante nosotros.
Yo: gracias…por su generosidad. A todos… ¡gracias por compartir conmigo esta vivencia tan maravillosa!
Moisés: Ahora sabes cual es tu compromiso..tienes dentro de tí algo muy especial que te va a ayudar en este peregrinar..Mi misión a terminado….y debo de regresar a mi nivel vibracional, no obstante… comunicarte que ahora estas en un camino dichoso y lleno de grandes expectativas, que solo tú descubrirás poco a poco, a lo largo del tiempo.
Nos fundimos en un amoroso abrazo..Le volví a dar las gracias por su presencia y por su lección magistral. Siguió caminando por la orilla de la playa hasta que su silueta se difuminó en el horizonte..
Yo volví, poco a poco, a mi sala llena de una emoción incontenible. Al llegar a ella me abracé a mi consejero y me eché a llorar de alegría, no era consciente todavía de la experiencia que había vivido..Me consoló con sus besos y me ofreció a beber una infusión para calmar mi estado..
Mi consejero volvió a recordarme mis tareas y a preguntarme si mañana volvería. Y claro… yo le contesté un SI! rotundo. Había entendido muy bien el propósito por el que me había visitado Moisés, aquél Gran Sabio…así que me despedí de él efusivamente e inicié el camino al estado natural..
Inma Gálvez.
