viernes, 30 de julio de 2010

TU ERES EL RESULTADO DE TI MISMO

No culpes a nadie, nunca te quejes de nada ni de nadie, porque fundamentalmente, tú has hecho tu vida.
Acepta la responsabilidad de edificarte a ti mismo y el valor de acusarte en el fracaso, para volver a empezar, corrigiéndote.
El triunfo del verdadero hombre surge de las cenizas del error.
Nunca te quejes del ambiente o de los que te rodean, hay quienes en tu mismo lugar supieron vencer; las circunstancias son buenas o malas según la fortaleza de tu corazón.
Aprende a convertir toda situación difícil en un arma para luchar.
No te quejes de tu pobreza, tu soledad o tu suerte, enfréntate con valor y acepta que de una u otra manera son el resultado de tus actos y la prueba de que has de ganar.
No te amargues con tu propio fracaso, ni se lo cargues a otro, acéptate ahora, o siempre seguirás justificándote como niño; recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar y que ninguno es tan terrible para claudicar.
Deja de engañarte; eres la causa de ti mismo, de tu necesidad, de tu dolor, de tu fracaso.
Si tú has sido el ignorante, el irresponsable, tú, únicamente tú; nadie pudo haber sido por ti.
No olvides que la causa de tu presente es tu pasado, como la causa de tu futuro es tu presente.
Aprende de los fuertes, de los audaces, imita a los enérgicos, a los vencedores, a quienes no aceptan situaciones, a quienes vencieron a pesar de todo; piensa menos en tus problemas y más en tu trabajo, y tus problemas sin alimento morirán.
Aprender a nacer desde el dolor y a ser más grande, que es el más grande de los obstáculos. Mírate al espejo de ti mismo, comienza a ser sincero contigo, reconociéndote por el valor, por tu voluntad y por tu debilidad para justificarte.
Recuerda que dentro de ti hay una fuerza que todo puede hacerlo reconociéndote a ti mismo más libre y más fuerte.
Dejarás de ser un títere de las circunstancias, porque tú mismo eres tu destino y nadie puede sustituirte en la construcción de tu propio destino.
Levántate y mira por la mañana, respira la luz del amanecer; tú eres parte de la fuerza de la vida. Ahora despierta, camina y lucha.
Decídete y triunfarás en la vida, nunca pienses en la suerte, porque la suerte es: El pretexto de los fracasados.

Pablo Neruda



                                                                                    

jueves, 29 de julio de 2010

Un Sabio dijo....


"Existen apenas dos formas de ver la vida,
una es pensar que los milagros no existen,
la otra, que todo es un milagro"
Albert Einstein

martes, 20 de julio de 2010

La Energía del Dinero



Ha llegado a mis manos, un artículo que me ha hecho abrir más, si cabe, los “ojos”…..Alessandro Di Masi nos da su muy acertado punto de vista sobre el valor que tiene todo aquel profesional que se dedique a las terapias manuales complementarias. Y como nada es “casual”…desde aquí doy las gracias por todo aquello que ha ayudado, para que me llegue esta valiosa información. Gracias Alessandro!!
Os transcribo textualmente el artículo íntegro, ¡¡que lo disfrutéis!!


El Dinero es Energía.


"Imaginemos a alguien que trabaja en una fábrica de vehículos de automoción, en una fábrica de coches, ganando mil euros al mes. Le gusta su trabajo pues se dedica a colaborar en la creación de algo que le gusta a la gente. Un coche nuevo, algo nuevo, algo nuevo en la vida, algo que le durará seis o siete años. Nos remontaremos a la época en la que el director de tu empresa te convoca en su despacho para pagarte tu sueldo, en metálico, en efectivo. Te da un billete nuevo de mil euros, esos mil euros representan 180 horas de tu cariño, de tu dedicación, en definitiva, de tu trabajo. Cuando los recibes no te sientes mal, te ayuda a valorar tu esfuerzo. Sentirse valorado da felicidad. El dinero es la forma en la cual la sociedad actual nos dice “Gracias”, “Amo lo que haces” y los experimentos del Dr. Masaru Emoto (El Poder Curativo del Agua – Ed. Obelisco) nos confirman que son las palabras que más curan.
Consideremos que ha podido ahorrar y ahora se puede gastar esos mil euros, le gusta el fútbol, se acerca el mundial y al pasar por un establecimiento ve una televisión que cuesta mil euros, valora que lo puede pagar y lo hace con ese billete de mil euros.
El comercial que le vende el aparato tiene una hija que está a punto de casarse. Sabe que su hija estará dos o tres años de alquiler, en un piso hasta que pueda conseguir algo en propiedad. Este hombre piensa en algo que le pudiera regalar a su hija. De vuelta a casa pasa por un centro comercial y ve el anuncio de una tienda de muebles: ¡Amueble su piso por 999 euros!, piensa que, de momento, sería una buena opción mientras puedan adquirir otros productos mejores, se encontrarán su casa amueblada con mi regalo.
El vendedor de muebles necesita animarse y al ver que ha conseguido la venta, decide tomarse unas vacaciones. Es una persona a la que le gusta mucho el mundo de las energías y siempre ha tenido pendiente ir a Egipto, ahora es el momento. Decide viajar a Egipto a sentir las energías de las pirámides, Luxor, Karnak, el Valle de los Reyes, Abu Simbel…
Este vendedor paga su viaje, le cuesta mil euros y los paga con ese mismo billete. Es el mismo billete que pagó el operario de la fábrica de coches, el mismo que pagó los muebles de la casa de la hija del vendedor de televisores y ahora es el mismo que pagará un viaje a Egipto.
Cada vez que ese billete cambia de mano aumenta su valor: sube su vibración.
La gente que dice: “¡El dinero no da la felicidad!” no se da cuenta que rechaza el dinero. El dinero es una energía. Mira cómo este billete ha ido ganando, esa energía está memorizada en él. ¿Por qué creen que los vendedores de los mercados árabes se pasean con los bolsillos llenos de billetes? Si queremos que un terapeuta tenga calidad en su trabajo debemos valorar ese trabajo y cada sanador debe aprender a cobrar por su trabajo. La mayoría de los terapeutas no lo hace. La mayoría de los terapeutas de terapias manuales: reiki, reflexología, etc., se quedan en su grupo de amigos, se hacen terapias entre ellos, ninguno está realmente enfermo, ninguno lo necesita realmente. Eso hace que no vean resultados, no progresan. Como no cobran deben seguir yendo a la fábrica para recibir sus mil euros al mes, mientras el sector de la medicina, que a veces no se merece esos sueldos, lo cobran en un día.
Enseño a los terapeutas también un poco de marketing, no sólo sanación. Si tienen un buen producto, que es un valor suyo, su sabiduría, la tienen que vender y no regalar. Los sanadores deben ejercer seriamente y no desde sótanos, garajes y buhardillas. En Suecia, Noruega, Dinamarca y Alemania tienen más trabajo que los médicos de formación académica.
Si observamos las leyes españolas yo estoy en el epígrafe de “curanderos”. No somos merecedores de respeto, imaginamos a un curandero como a un abuelo indioamericano con plumas, colores, pintado, con campanillas. Tiene mala reputación. Para Hacienda un curandero es alguien que cobra “la voluntad”. La voluntad, para mí, es muy incómoda. Si yo valoro su trabajo y él me dice déme la voluntad, da la impresión que es un humilde mendigo. Yo he comprado algo y en la intención de hacerme un favor que yo quiero valorar, pienso…si es curandero, es muy modesto y yo le voy a dar 20 euros. Cuando me voy me asalta la duda: ….pensará que soy un tacaño, es verdad que me ha ayudado….pero no puedo dar marcha atrás, es posible que no vuelva más por la sensación que me ha quedado de no haber valorado bien su trabajo. Posiblemente me ha hecho una buena sanación, pero al sentirme mal por no haber valorado bien su trabajo, esa labor queda incompleta y la sanación no lleva una buena energía, la vibración que ha generado la visita no es buena. Si por el contrario el cliente le da 100 euros, el sanador podría pensar: “ese tira el dinero por las ventanas, ¡que prepotente…!”. Pague lo que pague, me quedo con dudas de haber quedado bien o mal y la vibración tampoco es buena. Cuando la vibración no es buena, solo puede ser mala. Las malas vibraciones son el contrario de una sanación. Cuando pagamos al médico con nuestra tarjeta, si somos honestos, nos damos cuenta que son los demás que pagan por nosotros. El habernos aprovechado de los demás no da buena vibración.
Suponemos que suelo ir a un buen masajista que esta semana se ha ido de vacaciones. Le pregunto a algún amigo si conoce a otro buen masajista, alguno me dice que sí, que conoce a un masajista extraordinario, me facilita los datos y me pongo en contacto con él, me da cita para el día siguiente a última hora de la tarde y pienso que estará muy ocupado cuando me ha citado a esa hora. Voy a su casa, es un señor joven, casado, con dos hijas pequeñas. Me acompaña a su garaje en el que improvisa un pequeño consultorio, eso me hace sentir incómodo, yo soy muy exigente para mi centro, para mis colegas y esa situación me hace sentir un poco ridículo, pero me hace uno de los mejores masajes que he recibido en mi vida. Me levanté de la camilla flotando y pensando el talento que le había dado Dios. Al preguntarle cuánto le debo él me contesta que, al ser amigo de su amigo, no quiere cobrar, “los amigos de mis amigos son mis amigos”. Le insisto de nuevo intentando hacerle ver que ha hecho un trabajo excelente, ¡Vamos, amigo, dime cuanto te debo!, ¿Cuánto vale?” me contesta que NADA, no quiero dinero por esto. Él me ha dicho exactamente lo que “vale” su trabajo: NADA. (por la PNL sabemos que cada palabra tiene una vibración). Yo me quedo con una deuda, el cincuenta por ciento de las enfermedades son causadas por deudas. Las deudas matan a la gente. No me ha querido cobrar nada, le doy las gracias y salgo pensando que con ese talento, yo, debería hacer publicidad por él. En cierto momento, después, me vuelvo a sentir con grandes dolores de espalda y pienso en él. Quiero sus manos, pero no lo voy a molestar, además no cobra. Si después de trabajar todo el día en la fábrica le voy a robar su tiempo, el de su mujer, el de sus hijos, me siento mal. Mejor me voy a ver a un profesional. Un profesional cobra. Si cobra da valor a lo que hace, por lo tanto le gustará, lo hará mejor y….podrá vivir de ello.
Esos son valores que quiero cambiar en la medicina alternativa.
En Suecia, en Alemania, en Chequia, el 50% de los profesionales de la salud son heilpraktiker que significa: “practicante de salud”, “especializado en medicina natural”. Los pacientes desean alternativas a las pastillas, quieren mejorar su estado en toda la extensión del término y necesitan profesionales de LA SALUD. En esos países ya se enseña a todos los médicos cuál es la causa metafísica de las enfermedades.
Ahora, en Suecia, es difícil escuchar que alguien diga que está enfermo, la mayoría saben que, si estás enfermo, es que has hecho algo mal, que piensas mal, que actúas mal o que simplemente ignoras algo. En los hospitales suecos hay pacientes, pero la gran mayoría están por fracturas, accidentes, muy pocos por enfermedades.
Albert Einstein dijo:……que si algún día todos dejamos de mirar a la Luna, la luna desaparecerá…”.


De la revista “Universo holístico”.
www.guiacieloytierra.es

sábado, 17 de julio de 2010

Steve Jobs: "conectar los puntos"

Discurso de Graduación de Steve Jobs en la Universidad de Stanford

…”Gracias, tengo el honor de estar hoy aquí con vosotros en vuestro comienzo, en una de las mejores universidades del mundo.
La verdad sea dicha, yo nunca me gradué. A decir verdad, esto es lo más cerca que jamás he estado de una graduación universitaria. Hoy os quiero contar tres historias de mi vida. Nada especial. Sólo tres historias. La primera historia versa sobre “conectar los puntos”. Dejé la universidad de Reed tras los seis primeros meses, pero después seguí vagando por allí otros 18 meses, más o menos, antes de dejarlo del todo. Entonces, ¿Por qué lo dejé? todo comenzó antes de que yo naciera. Mi madre biológica era una estudiante joven y soltera, y decidió darme en adopción. Ella tenía muy claro que quienes me adoptaran tendrían que ser titulados universitarios, de modo que todo se preparó para que fuese adoptado al nacer por un abogado y su mujer. Solo que cuando yo nací decidieron en el último momento que lo que de verdad querían era una niña. Así que mis padres, que estaban en lista de espera, recibieron una llamada a medianoche preguntando: “tenemos un niño no esperado; ¿lo queréis?”. “Por supuesto” dijeron ellos.
Mi madre biológica se enteró de que mi madre no tenía titulación universitaria, y que mi padre ni siquiera había terminado el bachillerato, así que se negó a firmar los documentos de la adopción…sólo cedió meses más tarde, cuando mis padres prometieron que algún día yo iría a la universidad. Y 17 años más tarde fui a la universidad. Pero de forma descuidada elegí una universidad que era casi tan cara como Stanford, y todos los ahorros de mis padres, de clase trabajadora, los estaba gastando en mi matrícula. Después de seis meses, no le veía propósito alguno. No tenía idea de qué quería hacer con mi vida, y menos aún de cómo la universidad me iba a ayudar a averiguarlo. Y me estaba gastando todos los ahorros que mis padres habían conseguido a lo largo de su vida. Así que decidí dejarlo, y confiar en que las cosas saldrían bien. En su momento me dio miedo, pero en retrospectiva fue una de las mejores decisiones que nunca haya tomado. En el momento en que lo dejé, ya no fui más a las clases obligatorias que no me interesaban. Y comencé a meterme en las que parecían interesantes. No era idílico….No tenía dormitorio, así que dormía en el suelo de las habitaciones de mis amigos, devolvía botellas de coca-cola por los 5 céntimos del envase para conseguir dinero para comer, y caminaba más de 10 km los domingos por la noche para comer bien una vez por semana en el templo de los Hare Krishna. Me encantaba. Y muchas cosas con las que me fui topando al seguir mi curiosidad e intuición resultaron no tener precio más adelante. Os daré un ejemplo: en aquella época la Universidad de Reed ofrecía la que quizá fuese la mejor formación en caligrafía del país. En todas partes del campus, todos los pósters, todas las etiquetas de todos los cajones, estaban bellamente caligrafiadas a mano. Como ya no estaba matriculado y no tenía clases obligatorias, decidí atender al curso de caligrafía para aprender cómo se hacía. Aprendí cosas sobre el serif y tipografías sans serif, sobre los espacios variables entre letras, sobre qué hace realmente grande a una gran tipografía. Era sutilmente bello, histórica y artísticamente, de una forma que la ciencia no puede capturar. Lo encontré fascinante.
Nada de esto tenía ni la más mínima esperanza de aplicación práctica en mi vida. Pero diez años más tarde, cuando estábamos diseñando el primer ordenador Macintosh, todo eso volvió a mí. Y diseñamos el Mac con eso en su esencia. Fue el primer ordenador con tipografías bellas. Si nunca me hubiera dejado caer por aquél curso concreto en la universidad, el Mac jamás habría tenido múltiples tipografías, ni caracteres con espaciado proporcional. Y como Windows no hizo más que copiar el Mac, es probable que ningún ordenador personal los tuviera ahora. Si nunca hubiera decidido dejarlo, no habría entrado en esa clase de caligrafía y los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que poseen. Por supuesto, era imposible conectar los puntos mirando hacia el futuro cuando estaba en clase, pero fue muy, muy claro al mirar atrás diez años más tarde. De nuevo: no puedes conectar los puntos hacia adelante, solo puedes hacerlo hacia atrás.
Así que tenéis que confiar en que los puntos se conectarán alguna vez en el futuro. Tienes que confiar en algo, tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea. Porque creer que los puntos se unirán te darán la confianza de confiar en tu corazón. Esta forma de actuar nunca me ha dejado tirado, y ha marcado la diferencia en mi vida.
Mi segunda historia es sobre el amor y la pérdida. Tuve suerte, supe pronto en mi vida qué era lo que más deseaba hacer. Woz y yo creamos Apple en el garaje de mis padres cuando tenía 20 años. Trabajamos mucho, y en diez años Apple creció de ser sólo nosotros dos a ser una compañía valorada en 2 mil millones de dólares y 4.000 empleados. Hacía justo un año que habíamos lanzado nuestra mejor creación –el Macintosh- un año antes…pero hacía poco que había cumplido los 30, me despidieron. ¿Cómo te pueden echar de la empresa que tú has creado? Bueno, mientras Apple crecía contratamos a alguien que yo creía muy capacitado para llevar la compañía junto a mí, y durante el primer año, más o menos, las cosas fueron bien. Pero luego nuestra perspectiva del futuro comenzó a ser distinta, y finalmente nos apartamos completamente. Cuando eso pasó, nuestra Junta Directiva se puso de su parte. Así que a los 30 estaba fuera. Y de forma muy notoria. Lo que había sido el centro de toda mi vida adulta se había ido…fue devastador. Realmente no supe qué hacer durante algunos meses. Sentía que había dado de lado a la anterior generación de emprendedores, que había soltado el testigo en el momento en que me lo pasaban. Me reuní con David Packard (de HP) y Bob Noyce (Intel), e intenté disculparme por haberlo fastidiado tanto. Fue un fracaso muy notorio, e incluso pensé en huir del valle (Silicon Valley). Pero algo comenzó a abrirse paso en mí –aún amaba lo que hacía-. El resultado de los acontecimientos en Apple no había cambiado eso ni un ápice. Había sido rechazado, pero aún estaba enamorado. Así que decidí comenzar de nuevo. No lo vi así entonces, pero resulto ser que el que me echaran de Apple fue lo mejor que jamás me pudo haber pasado; había cambiado el peso del éxito por la ligereza de ser de nuevo un principiante, menos seguro de las cosas, me liberó para entrar en uno de los períodos más creativos de mi vida. Durante los siguientes cinco años, creé una empresa llamada Next, otra llamada Pixar, y me enamoré de una mujer asombrosa que se convertiría después en mi esposa. Pixar llegó a crear el primer largometraje animado por ordenador, Toy Story, y es ahora el estudio de animación más exitoso del mundo. En un notable giro de los acontecimientos, Apple compró Next, y yo regresé a Apple, y la tecnología que desarrollamos en Next es el corazón del actual renacimiento de Apple. Y Laurene y yo tenemos una maravillosa familia. Estoy bastante seguro de que nada de esto habría ocurrido si no me hubieran echado de Apple. Creo que fue una medicina horrible, pero supongo que el paciente la necesitaba. A veces, la vida te da en la cabeza con un ladrillo.
No perdáis la fe. Estoy convencido de que la única cosa que me mantuvo en marcha fue mi amor por lo que hacía. Tenéis que encontrar qué es lo que amáis, y esto vale tanto para vuestro trabajo como para vuestros amantes. El trabajo va a llenar gran parte de vuestra vida, y la única forma de estar realmente satisfecho es hacer lo que consideréis un trabajo genial. Y la única forma de tener un trabajo genial es amar lo que hagáis. Si aún no lo habéis encontrado, seguid buscando. No os conforméis. Como en todo lo que tiene que ver con el corazón, lo sabréis cuando lo hayáis encontrado. Y como en todas las relaciones geniales, las cosas mejoran y mejoran según pasan los años. Así que seguid buscando hasta que lo encontréis. No os conforméis.
Mi tercera historia es sobre la muerte. Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo como: “Si vives cada día como si fuera el último, algún día tendrás razón”. Me marcó, y desde entonces, desde los últimos 33 años, cada mañana me he mirado en el espejo y me he preguntado: “Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?” y si la respuesta era “No” durante demasiados días seguidos, sabía que necesitaba cambiar algo.
Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado para ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida. Porque prácticamente todo, las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es verdaderamente importante. Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir tu corazón.
Hace casi un año me diagnosticaron cáncer. Me hicieron un chequeo a las 7:30 de la mañana, y mostraba claramente un tumor en el páncreas. Ni siquiera sabía que era el páncreas. Los médicos me dijeron que era prácticamente seguro un tipo de cáncer incurable, y que mi esperanza de vida sería de tres a seis meses. Mi médico me aconsejó que me fuese a casa y dejara zanjados mis asuntos, forma médica de decir: prepárate a morir. Significa intentar decirles a tus hijos en unos pocos meses lo que ibas a decirles en diez años. Significa asegurarte de que todo queda atado y bien atado, para que sea tan fácil como sea posible para tu familia. Significa decir adiós.
Viví todo un día con ese diagnóstico. Luego, a última hora de la tarde, me hicieron una biopsia, metiéndome un endoscopio por la garganta, a través del estómago y el duodeno, pincharon el páncreas con una aguja para obtener algunas células del tumor. Yo estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me dijo que cuando vio las células al microscopio el médico comenzó a llorar, porque resultó ser una forma muy rara de cáncer pancreático que se puede curar con cirugía. Me operaron, y ahora estoy bien. Esto es lo más cerca que he estado de la muerte, y espero que sea lo más cerca que esté de ella durante algunas décadas más.
Habiendo vivido esto, ahora os puedo decir esto con más certeza que cuando la muerte era un concepto útil, pero puramente intelectual: nadie quiere morir. Ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar allí. Y sin embargo la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así tiene que ser, porque la Muerte es posiblemente el mejor invento de la Vida. Es el agente del cambio de la Vida. Retira lo viejo para hacer sitio a lo nuevo. Ahora mismo lo nuevo sois vosotros, pero dentro de no demasiado tiempo, de forma gradual, os iréis convirtiendo en lo viejo, y seréis apartados. Siento ser dramático, pero es bastante cierto. Vuestro tiempo es limitado, así que no lo gastéis viviendo la vida de otro. No os dejéis atrapar por el dogma que es vivir según los resultados del pensamiento de otros. No dejéis que el ruido de las opiniones de los demás ahogue vuestra propia voz interior. Y lo más importante, tened el coraje de seguir a vuestro corazón y vuestra intuición. De algún modo ellos ya saben lo que tú realmente quieres ser. Todo lo demás es secundario.
Cuando era joven, había una publicación asombrosa llamada The Whole Earth Catalog (Catálogo de toda la Tierra), una de las biblias de mi generación. La creó un tipo llamado Stewart Brand no lejos de aquí, en Menlo Park, y la trajo a la vida con su toque poético. Eran los últimos años 60, antes de los ordenadores personales y la autoedición, así que se hacía con máquinas de escribir, tijeras, y cámaras Polaroid. Era como Google con tapas de cartulina, 35 años de que llegara Google: era idealista, y rebosaba de herramientas claras y grandes conceptos.
Stewart y su equipo sacaron varios números del The Whole Earth Catalog, y cuando llego su momento, sacaron un último número. Fue a mediados de los 70, y yo tenía vuestra edad. En la contraportada de su último número había una fotografía de una carretera por el campo a primera hora de la mañana, la clase de carretera en la que podríais encontrarte haciendo autostop si sois aventureros. Bajo ella estaban las palabras: “Sigue hambriento. Sigue alocado”. Era su último mensaje de despedida. Sigue hambriento. Sigue alocado. Y siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando os graduáis para comenzar de nuevo, os deseo eso.
“Seguid hambrientos. Seguid alocados”.

Steve Jobs
Presidente de Apple

jueves, 15 de julio de 2010

Objetivo


Así como el cuerpo necesita alimento, reposo, ejercicio y cierta calidad de vida, también la mente los necesita para elevarse y llenar de sentido nuestra vida.

La meditación es el mejor modo de dárselo y además es la forma más sencilla, económica y eficaz de relajar la mente y vivir en paz, tranquilidad y armonía interior.


"Lo que ves con los ojos cerrados es lo que cuenta" (curandero sioux)


"Escucha, o tu lengua te volvera sordo" (dicho de los indios americanos)


miércoles, 14 de julio de 2010

Replanteárselo todo!














....Nada debe aceptarse como definitivo. Es preciso conservar el sentido de la maravilla, la duda metódica, la curiosidad. Poner en tela de juicio las evidencias.
"Desgraciado el hombre que no se lo ha replanteado todo, al menos una vez en su vida" (Pascal)

lunes, 12 de julio de 2010

¡Eres Maravilloso!



"Eres maravilloso tal como eres.
No intentes ser otra persona.
Eso que buscas ya está ahí, dentro de ti.
No existe fuera de ti mismo.
Todo lo que necesitas está ya en ti:
en el aquí y el ahora.
Thich Nhat Hanh.


viernes, 2 de julio de 2010

¡Tú eliges!


«No hay razón para sufrir. La única razón por la que sufres es porque así tú lo exiges. Si observas tu vida encontrarás muchas excusas para sufrir, pero ninguna razón válida. Lo mismo es aplicable a la felicidad. La única razón por la que eres feliz es porque tú decides ser feliz. La felicidad es una elección, como también lo es el sufrimiento».


Dr. Miguel Ruiz